Todos solemos comenzar el año con algunos kilos de más, por las fiestas y las vacaciones, para bajarlos además de comer sano y ejercitarse es importante tomar agua en las comidas y durante el día. Beber entre comidas colabora con la digestión, la ansiedad y el estado de la piel.
No es necesario hacer un cambio radical, ni sustituir las comidas por batidos, pero hay que dejar las excusas a un lado y ver la forma de bajar esas calorías.
Lo ideal es no abandonar el hábito de tomar agua durante las fiestas, ni en las vacaciones, pero sabemos que a todos se nos pasa cuando estamos entretenidos. Si somos de esos que dejamos todo a un lado, es momento de retomar la costumbre de consumir al menos dos litros de agua al día.
Trata de tener una dieta saludable, evitando la comida chatarra y ponte a hacer ejercicios. Dejar de comer nunca es una opción, porque es probable que sufras una falta de nutrientes, pérdida de masa muscular y te sientas con poca energía.
Consumir agua entre las comidas y a lo largo del día colabora con tener una mejor digestión y baja los niveles de ansiedad.