Si llegaste aquí, es probable que te hayas formulado esa pregunta. Porque, claro,  aunque el interés por este tipo de agua sube y sube, aún existe confusión sobre lo que realmente significa consumirla. Pero ¡descuida! Te lo aclaramos a continuación.

Cuando ingieres agua purificada estás consumiendo agua potable filtrada, a la que se le han extraído diversos agentes indeseados, como bacterias, parásitos, virus, cloro, malos olores y sabores.

Entonces, ¿qué tomas cuando bebes agua purificada? Muy simple: agua limpia, fresca y sabrosa, que permite que te hidrates correctamente, evitando que sufras malestares o enfermedades a causa de microbios. Esto, mientras disfrutas del sabor de un elemento vital.

Recomendaciones

Si bien el agua purificada es mucho mejor que la potable, no todas son de calidad. Por eso la sugerencia es que te fijes en dos aspectos importantes:

Con certificaciones

Con el fin de asegurar qué tomas cuando bebes agua purificada,  el proveedor debe contar con certificaciones que respalden que el elemento vital ha sido filtrado en un 100%.  Algunos nombres que te pueden ayudar son el Sello de Oro (Gold Seal), el UL (Laboratorios Aseguradores Inc.) y el NSF/ANSI.

Sin botellones

Además de ser enemigos del medio ambiente, los botellones plásticos también reducen la calidad de la purificación debido a su material, que es propenso a dañarse por golpes o exposición al sol.

Por eso, el consejo es optar por otras alternativas, como agua purificada en dispensadores, que realizan un proceso de filtración garantizado y que son eco-amigables.

Y ahora que sabes qué tomas cuando  bebes agua purificada, ¿te atreves a probarla?