Todos tenemos grabado el discurso de que hay que tomar al menos dos litros de agua al día. Sin embargo, según expertos, la cantidad necesaria depende de la edad, el género, la ubicación geográfica y las actividades que desarrolle cada individuo.
Según los expertos en la salud, cualquier individuo debe tomar al menos dos litros de líquido diario. De esa cantidad,1,6 litros deben ser de agua pura, el otro 0,4 puede ser de otras bebidas como jugos, o refrescos sin azúcar. Cumplir con esta pauta trae ciertos beneficios.
Uno de los principales retos de la humanidad, que cada vez se vuelve más importante, es lograr ahorrar agua para la conservación del planeta. El agua es el principal recurso para las necesidades básicas de hidratación e higiene de las personas. Sin embargo, a menudo el gasto en agricultura e industria sobrepasa la capacidad de los recursos naturales.
En verano es cuando más debemos hidratarnos, ya sea en la playa, en la oficina o haciendo mandados. Sin embargo, ¿cómo podemos hacer para que el agua se mantenga fría?
Se vienen las vacaciones y con ellas las escapadas a la playa en familia y, ¿a quién no le gusta ir a la playa? Es diversión asegurada para todos los miembros de la familia, descanso para los más grandes y entretenimiento para los más chiquitos. Leer Más
Sin importar la edad y el género, todos debemos consumir agua, ya que es un nutriente fundamental para nuestro organismo. Sin embargo, los hombres necesitan hidratarse más que las mujeres. Leer Más
¿Ya tienes planes para este verano? A lo mejor, ¿un viaje? Si estás planificando ir fuera del país hay algunos aspectos que deberías tener en cuenta para que todo salga bien.
Todos sabemos que tomar agua de la llave no es la mejor opción debido a que la calidad no suele ser buena. Sin embargo, ¿cómo podemos saber qué tan mala es la de nuestra casa?
Los humanos solemos hacer acciones que causan daños nocivos para el medio ambiente. Algunos más conscientes que otros, algunos tratando de generar consciencia y otros cambiando conductas para aplicar un cambio.
El trabajo en la oficina puede que se vuelva un poco constante por momentos, pero es importante no olvidar incorporar ciertos hábitos fundamentales para el bienestar físico y mental de uno. Por ejemplo, como es el caso del consumo regulado de agua.